Tribunal en Países Bajos absolvió a sentenciado por homicidio involuntario, por nueva evidencia sobre posible suicidio de la víctima
Este lunes, un tribunal de Arnhem, Países Bajos, absolvió del homicidio involuntario de su novia a un hombre que fue sentenciado a 10 años de internamiento obligatorio en institución psiquiátrica por este motivo.
Se trata de la persona identificada como Rob B. procesado y encontrado culpable por la Corte de Distrito de Den Bosch a 10 años de internamiento en una institución psiquiátrica por el homicidio de su novia Regie van den Hoogen, de 34 años.
El homicidio ocurrió en 2004 en el departamento que Regie van den Hoogen y Rob B. compartían en Rosmalense, en la ciudad de Den Bosch, motivo por el cual el suceso fue conocido como “el homicidio de Rosmalense”.
Rob B. declaró que cuando llegó al departamento, su novia ya estaba muerta y que la encontró en el suelo con un corte en la garganta, hecho con un cuchillo de cocina. Regie y Rob B. habían estado en tratamiento psiquiátrico.
Aunque Rob B. siempre negó ser responsable de homicidio, los análisis forenses del momento establecieron que el corte no coincidía con el realizado por una persona diestra y que la sangre había salpicado la ropa de B., lo que apuntaba a su culpabilidad, negando la versión de él de que ella se había suicidado.
En 2012, un grupo de estudiantes de la Universidad Vrije de Ámsterdam, participantes del proyecto Gerede Twijfel o Duda razonable, empezaron a revisar la evidencia del caso, y en 2015, Danaé Stad, una de las estudiantes que revisó la evidencia, y Peter van Kloppen, líder del proyecto Gerede Twijfel, publicaron un libro sobre la muerte de Regie van der Hoogen, titulado Het likkende hondje, El perro que lame, en el que analizaron las conclusiones arrojadas en el estudio de la evidencia en el lugar del siniestro.
“Pedimos a docenas de personas que nos mostraran con una regla cómo cortarían sus gargantas o cómo cortarían la garganta de alguien más. Todos lo hicieron de forma diferente”, declaró Danaé Stad al medio neerlandés NRC, lo que sentó las bases de una duda razonable sobre lo que Rob B. había expuesto siempre que él no había matado a su novia y que ella se suicidó.
Con esta nueva evidencia, en 2016, el abogado de Rob B. pidió a la Suprema Corte que se reabriera el caso para analizarlo. Cuando el Instituto Forense Neerlandés reanalizó la evidencia, la fiscalía también pidió la reapertura del caso por considerar que la evidencia con la que se condenó a Rob B., actualmente de 64 años, era insuficiente y que todo apunta a que Regie cometió suicidio.
Rob B., quien ya cumplió su sentencia y reside en una institución psiquiátrica, no estuvo presente en el tribunal para conocer la decisión, pero su abogado, Pieter van der Kruijs, declaró: “Él está muy feliz. Esto ha terminado.”
Horas después de conocido el veredicto, Mariëtte Bode, fiscal general nacional jefe del Ressortsparket, Ministerio Público, se disculpó: “El Ministerio Público lamenta el enorme sufrimiento causado a Rob B. y a sus seres queridos, y va a analizar con ojo crítico el curso de este caso”. En el comunicado se agregó que "Se cometieron errores bajo la responsabilidad del Ministerio Público y pedimos disculpas por eso".
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