Amber Laura Heard ha presentado un escrito solicitando se deseche la demanda interpuesta en su contra por Johnny Depp, quien acusa a la actriz de difamación por un artículo publicado en The Washington Post en diciembre del año pasado.
Heard y Depp estuvieron casado de febrero de 2015 a mayo de 2016, cuando ella solicitó el divorcio y obtuvo una orden de restricción temporal contra él por violencia física y verbal en toda su relación. En respuesta, los abogados de Depp alegaron que estaba "intentando asegurar un beneficio financiero del divorcio alegando abuso". Heard testificó sobre el abuso bajo juramento en una deposición judicial de divorcio. La evidencia del presunto abuso de sus presentaciones judiciales también se publicó en los medios de comunicación.
Finalmente las partes llegaron a un acuerdo en 16 de agosto de 2016 y el divorcio finalizó en enero de 2017. Heard recibió 7 millones de dólares, mismos que aparentemente donó en partes iguales a American Civil Liberties Union (ACLU) para prevenir la violencia en contra de las mujeres, y al Hospital Infantil de Los Ángeles. La ex pareja emitió una declaración conjunta diciendo que "su relación era intensamente apasionada y, a veces, volátil, pero siempre ligada al amor. Ninguna de las partes ha hecho acusaciones falsas de obtener ganancias financieras. Nunca hubo ningún intento de daño físico o emocional”.
En diciembre de 2018 Heard publicó un artículo de opinión en The Washington Post, en el que ella habla sobre la violencia hacia las mujeres, la violencia que ella vivió desde muy joven y como “hace dos años, me convertí en una figura pública que representaba el abuso doméstico, y sentí toda la fuerza de la ira de nuestra cultura contra las mujeres que hablan”.
Ella en ningún momento menciona a Depp por su nombre ni ningún acto de violencia que el actor haya cometido, pero para el actor está claro que fue mencionado indirectamente con esa frase y presentó una demanda por difamación por 50 millones de dólares. En el escrito de demanda se señala que el artículo parte de la “premisa central de que la Sra. Heard era una víctima de abuso doméstico y que el Sr. Depp perpetró violencia doméstica contra ella". Depp también alegó que en realidad Heard había sido la abusadora y que sus acusaciones constituían un engaño montado en su contra.
En respuesta, Heard dijo que las afirmaciones de Depp no eran ciertas y fue más explícita. En documentos presentados a la Corte, llama en repetidas ocasiones a Depp, el monstruo, y describe como el actor abusó verbal y físicamente de ella en varias ocasiones, señalando que el actor probablemente no recordaba esos episodios violentos por el consumo excesivo de alcohol y drogas, que lo llevaban a tener lagunas mentales sobre los incidentes.
Para su última moción para desechar la demanda, Heard recurrió a Roberta Kaplan, una prestigiada abogada que encabezó la defensa del matrimonio entre personas del mismo sexo ante la Corte Suprema de los EE. UU.
En el escrito la abogada señala que "Hay una gran ironía en el corazón de este caso. En diciembre de 2018, la Demandada Amber Laura Heard publicó un artículo de opinión pidiendo 'cambios a las leyes, reglas y normas sociales' para que 'las mujeres que se presentan para hablar sobre la violencia reciban más apoyo'. Advirtió que dicha reforma es necesaria porque los hombres poderosos que han sido acusados de violencia no escatimarán en nada para castigar y hostigar a sus acusadoras. Meses después, el demandante John C. Depp, demostró el punto de la Sra. Heard al presentar esta demanda por difamación".
Según Heard, el mensaje dominante del artículo de opinión fue el momento político transformador sobre el movimiento #MeToo. Pidió al Congreso que reautorice la Ley de violencia contra las mujeres y criticó los cambios propuestos a las reglas del Título IX que rigen el tratamiento del acoso y la agresión sexual en las escuelas.
En cuanto a las declaraciones en controversia, Heard las enmarca como un esfuerzo por aprovechar una "experiencia de vida para apoyar este llamado a la acción". Los abogados de Heard argumentan que Depp no ha logrado presentar una demanda con argumentos verdaderamente procesables.
La defensa de Heard se centra en la libertad de expresión y para empezar señala que el título del artículo, "Amber Heard: hablé en contra de la violencia sexual y enfrenté la ira de nuestra cultura. Eso tiene que cambiar", no es una declaración hecha por ella, sino un resumen de la pieza hecho por The Washington Post, y destacan los abogados de la actriz, que aunque ese fuera el caso, la declaración consiste en una "opinión pura", que refleja su punto de vista y no es susceptible de encontrar la verdad o la falsedad.
El hecho de que lo expuesto por la actriz en el artículo es una opinión protegida por la libertad de expresión, también aplica, dicen los abogados en su escrito, para la declaración: "Me convertí en una figura pública que representaba el abuso doméstico".
"El Sr. Depp la lee como una declaración indirecta de que él abusó de ella en 2016", dice el escrito. "Eso es incorrecto. Este es un artículo de opinión sobre lo que le sucede a las mujeres que denuncian a los hombres por abuso doméstico y por qué la sociedad debería reaccionar de manera diferente. Dado ese contexto, su afirmación de convertirse en una 'figura pública que representa el abuso doméstico' y sufrir 'las consecuencias, es una declaración sobre lo que ella cree que sucedió después de acusar al Sr. Depp de violencia. Describe sus opiniones sobre las consecuencias personales, no los méritos subyacentes, de su decisión de denunciar al Sr. "Depp."
Los abogados de Depp tendrán su turno para oponerse a la moción de desechamiento y argumentar por qué cada una de las declaraciones de Heard es más que una opinión y es capaz de probarse como verdadera o falsa.
El riesgo para Depp es que de seguir el proceso, la evidencia presentada puede hacerse pública.
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